Después del tremendo y devastador ataque de un mago malvado, la decadencia del Gran Reino fue imparable. El hielo de Arcándida se derritió, la arena de Rocadocre se levantó y cubrió bosques y llanuras. El egoísmo y la discordia irrumpieron entre los habitantes. Año tras año, las familias reales iban desapareciendo junto a las últimas esperanzas de reinstaurar la paz y la armonía.
Un día, la joven Astrid se encuentra cara a cara con un misterioso lobo plateado. Al principio, duda de que sea posible un mundo distinto, pero, al final, será ella, contra todo y contra todos, quien encuentre a las otras descendientes de las antiguas princesas. Las herederas que, según una antigua profecía, un día serán capaces de luchar codo con codo para derrotar al mago malvado.